ON Holding (NYSE: ONON) avanza hacia un futuro robótico

Si ha observado las acciones de ON Holding (NYSE: ONON) durante el último año, es posible que se haya preguntado cómo un fabricante de zapatillas para correr está comportándose más como una empresa tecnológica, tras haber subido un 104%. Empieza a quedar claro por qué: la empresa con sede en Suiza ha estado introduciendo nueva robótica que promete reinventar la fabricación de zapatillas, alterando radicalmente las cadenas de suministro y las redes de distribución globales en el proceso.

Bautizada LightSpray, la tecnología utiliza un robot automatizado para fusionar 1,5 km de filamento de polímero en una suela prefabricada en un solo paso. Las zapatillas, que se asemejan a un calcetín futurista sin cordones, pueden producirse en tres minutos, sin necesidad de humanos, costuras o pegamento. Aunque todavía se encuentra en las primeras etapas de desarrollo, On ya ha entregado lotes limitados de esta avanzada zapatilla, demostrando cómo los fabricantes podrían producir un par mucho más cerca de los consumidores finales y, posiblemente, incluso a pedido en tiendas minoristas. El proceso podría simplificar las complejas cadenas de suministro que suelen ver la mercancía producida en fábricas lejanas y luego enviada al mercado en contenedores a grandes distancias. También reduce la dependencia de terceros que pueden estar sujetos a huelgas laborales o problemas de calidad.

“LightSpray no es solo una historia de marketing”, dijo el cofundador y copresidente ejecutivo de On, Caspar Coppetti, en una llamada con analistas el martes, después de que la empresa reportara un tercer trimestre récord en ventas y rentabilidad. “Esto tiene el potencial de realmente alterar la manera en que se fabrica el calzado… Podemos localizar la producción y fabricarlo a un costo comparable en cualquier parte del mundo”.

Coppetti insinuó que la empresa tiene planes mucho mayores para esta tecnología y quiere implementarla de manera amplia para los consumidores de estilo de vida, además de los corredores cotidianos; está explorando el desarrollo de líneas de producción completas que puedan automatizarse por completo. On informó que un modelo de rendimiento inicial, que se vendió por $330 antes de agotarse, brinda soporte cuando se usa, con un material que ofrece una sensación “similar a la de un textil” que envuelve el pie.

“No esperen que esto llegue al mercado en una escala significativa el próximo año ni el siguiente, pero realmente ahora estamos explorando más allá de un producto de rendimiento”, continuó. “Queremos llevarlo al mercado, a gran escala”.

Ese es exactamente el tipo de disrupción que tiende a atraer a inversores en busca del crecimiento exponencial característico de las empresas tecnológicas de vanguardia, como el fabricante de chips NVIDIA (NASDAQ: NVDA), cuyas acciones han subido un 202% en el último año. On ha superado a estrellas en ascenso como Deckers Outdoor (NYSE: DECK), el fabricante de la popular marca Hoka, que ha ganado un 71% en el mismo período. A los gigantes tradicionales de la industria les ha ido mucho peor, con Nike (NYSE: NKE) cayendo un 26%.

Aunque la disrupción real puede estar aún a unos años, On señaló en su último informe trimestral que ha visto una “aceleración significativa” de su negocio directo al consumidor. Citando lo que describió como un impulso significativo antes de la ajetreada temporada de compras navideñas, la empresa elevó su previsión para el año. También reportó que el reconocimiento de su marca aumentó en los últimos meses tras una fuerte presencia en los Juegos Olímpicos de París; en EE. UU., ese reconocimiento se duplicó en el último año, alcanzando al 20% de los consumidores.

“Todo esto confirma que nuestros esfuerzos están dando resultados”, afirmó Coppetti.

On es conocida por sus elegantes diseños y suelas tipo nube, populares entre clientes de alto poder adquisitivo, pero está mostrando que quiere ser una empresa tecnológica disruptiva, además de un diseñador de ropa deportiva y moda. Si LightSpray despega y sitúa a la empresa a la vanguardia de la fabricación robótica y la impresión 3D, los inversores podrían estar ganando no solo un sprint, sino una maratón.