Arnault apuesta a su amistad con Trump para esquivar los aranceles a LVMH (CBOE: MC)

“El juego reconoce al juego” es una expresión que se usa para describir el respeto mutuo entre dos figuras destacadas en un mismo campo. Se emplea a menudo para referirse a atletas, artistas y empresarios.
Sin duda, esto aplica a Donald Trump y Bernard Arnault, propietario de LVMH (CBOE: MC), quien es la quinta persona más rica del mundo con un patrimonio neto de 172 mil millones de dólares, según Forbes. Y ahora, Arnault espera que Trump se abstenga de imponer aranceles a su empresa.
Los dos titanes de los negocios se hicieron amigos a principios de la década de 1980, cuando ambos competían por convertirse en pesos pesados del sector inmobiliario en Nueva York, según informa The Wall Street Journal.
A medida que Arnault construía su imperio del lujo, que incluye los bolsos Louis Vuitton y el champán Moët & Chandon, sus vínculos con Trump se estrecharon. Por ejemplo, Louis Vuitton alquila su tienda en pleno Manhattan a la Organización Trump. Además, ambos han forjado lazos personales, y varios miembros de sus familias también han entablado amistades.
Durante su primer mandato presidencial (2017-2021), Trump amenazó con imponer aranceles a la industria europea del lujo. Sin embargo, LVMH optó por aumentar su producción de bolsos en EE. UU., y Arnault y Trump anunciaron conjuntamente la medida. Finalmente, la idea de los aranceles fue descartada.
La explicación de Trump
“No puedo gravarlo, porque se mudó a Estados Unidos. Fue muy inteligente. Se adelantó a todos”, declaró Trump, según The Journal. Esto da una idea de lo personal que puede llegar a ser la política comercial.
Avancemos hasta el presente: Trump ahora amenaza con aranceles del 200 % a todas las bebidas alcohólicas europeas exportadas a EE. UU. El conflicto comenzó con sus recientes aranceles sobre productos de acero y aluminio. Europa respondió con un arancel del 50 % a las importaciones de whisky estadounidense. Y Trump replicó con su amenaza a las bebidas alcohólicas europeas.
Un arancel del 200 % asestaría un duro golpe a las ventas de champán de LVMH, ya que EE. UU. es uno de sus mercados más importantes. Además de Moët & Chandon, las marcas de LVMH incluyen Veuve Clicquot, Dom Pérignon, Champagne Krug, Ruinart y Chandon.
Ahora la gran pregunta es si LVMH logrará escapar de este nuevo arancel. Algo que podría jugar a su favor es que la compañía está considerando aumentar sus inversiones en sus plantas de fabricación en EE. UU. durante los próximos dos años, según declaró un portavoz de la empresa a The Journal. LVMH también planea invertir más en Tiffany, su joyería estadounidense.
Trump suele reaccionar de forma muy positiva ante las empresas que anuncian nuevas inversiones en EE. UU., pero también parece decidido a endurecer su postura con la Unión Europea. Habrá que ver si el presidente elige proteger a su viejo amigo o si, por el contrario, decide intensificar la guerra comercial con Europa.