La consolidación continúa en la industria de artículos deportivos: Dick’s (NYSE: DKS) y Foot Locker (NYSE: FL)

La década de 1990 fue una época dorada para las tiendas de artículos deportivos. La ciudad de Nueva York, por ejemplo, contaba con una plétora de locales de Sports Authority, Modell’s, Foot Locker (NYSE: FL) y Athlete’s Foot.
Cuando quería el mismo par de zapatillas Nike (NYSE: NKE) que John McEnroe usaba en la gira sénior de tenis, sabía que tarde o temprano aparecerían en oferta en alguno de esos locales.
Pero los tiempos han cambiado. Los compradores se han volcado a internet para adquirir artículos deportivos, lo que ha provocado el cierre de muchas tiendas físicas. Sports Authority ya es historia. Dick’s Sporting Goods (NYSE: DKS) y Foot Locker son las únicas que conservan una presencia significativa fuera de línea. Dick’s tiene más de 850 tiendas en Norteamérica, y Foot Locker cuenta con unas 2.400 en todo el mundo.
La enorme contracción del sector parece desconcertante. Uno pensaría que los artículos deportivos son cosas que uno quiere probarse o probar antes de comprarlas. Aun así, la consolidación de la industria avanza sin freno.
Dick’s, el mayor minorista de artículos deportivos de EE. UU., acaba de acordar la compra de Foot Locker, especializada en zapatillas, por 2.400 millones de dólares. Foot Locker opera principalmente tiendas pequeñas en centros comerciales, mientras que Dick’s tiene grandes superficies en zonas suburbanas.
Daños arancelarios
Ambas compañías se han visto afectadas por los aranceles estadounidenses, que han elevado sus precios y debilitado la demanda de los consumidores. Según la Asociación Estadounidense de Ropa y Calzado, alrededor del 97 % de la ropa y el calzado que se venden en EE. UU. son importados.
Las acciones de Dick’s cayeron un 8,4 % en lo que va del año hasta el miércoles, el día previo al anuncio de la fusión, mientras que Foot Locker perdió un 41 %. El jueves, las acciones de Dick’s bajaron otro 14 %, mientras que las de Foot Locker se dispararon un 85 %.
Dick’s ha prosperado en el largo plazo: sus acciones se dispararon un 613 % en los últimos cinco años, beneficiándose de su tamaño y de la buena experiencia que ofrece a los clientes en sus tiendas. Foot Locker, en cambio, ha perdido un 50 % en ese mismo período. Fue especialmente afectada por la decisión de Nike—luego revertida—de enfocarse en las ventas directas al consumidor, excluyendo a minoristas como Foot Locker.
Los analistas ofrecieron opiniones mixtas sobre la operación.
“La gran pregunta que se planteará el mercado es si el riesgo de que DKS compre un minorista en apuros se ve más que compensado por los beneficios de sinergia y crecimiento”, escribió Michael Lasser, analista de UBS, en un comentario citado por Barron’s. “El tiempo lo dirá”.
Ventajas de la fusión
Entre los aspectos positivos, la fusión daría a Dick’s mayor poder de negociación frente a proveedores como Nike, según Jonathan Matuszewski, analista de Jefferies, citado por Women’s Wear Daily. Nike representa el 25 % del costo de ventas para Dick’s y el 59 % para Foot Locker.
“La nueva entidad también podría lograr ahorros indirectos en compras, mejores condiciones para publicidad y medios, y eficiencias en servicios compartidos”, afirmó. Con la adquisición, Dick’s aumentaría su participación en el mercado de artículos deportivos del 7,7 % actual al 11 %.
Del lado negativo, Dick’s tendrá que gestionar ahora las marcas de moda urbana y estilo de vida de Foot Locker y competir con minoristas de calzado más ágiles, señaló John Kernan, analista de TD Cowen, citado por Bloomberg. Calificó el acuerdo como un “error estratégico” para Dick’s. “Tenemos innumerables ejemplos de fusiones y adquisiciones que destruyeron miles de millones de dólares en valor desde que seguimos este sector”, concluyó.
Así que no está claro si, en el caso de Dick’s, más grande significa necesariamente mejor.