El BCE podría seguir recortando tasas mientras la Fed hace una pausa

por
ecb

Aunque la Reserva Federal de Estados Unidos ha pausado sus recortes de tasas desde diciembre, se espera que el Banco Central Europeo continúe bajándolas el jueves.

Hay una razón simple por la que el BCE está avanzando más que la Fed: la economía europea apenas crece, mientras que la de Estados Unidos sigue en auge. El PIB de la eurozona se expandió solo un 0,7% el año pasado, y el BCE no espera una gran aceleración este año, proyectando un crecimiento del 1,1%. Mientras tanto, la economía de Estados Unidos creció a un ritmo anualizado del 2,3% en el cuarto trimestre, aunque los datos han sido dispares desde entonces.

Alemania, la tercera economía más grande del mundo, ha registrado un crecimiento casi nulo en los últimos seis años. Su fuerte dependencia de las exportaciones (43% del PIB) se ha convertido en un problema debido a la desaceleración en los países que importan sus bienes, como China. Sin mercados de exportación sólidos, “el modelo económico de Alemania está muerto”, dijo Jacob Kirkegaard, miembro senior del Instituto Peterson de Economía Internacional, al Wall Street Journal.

La competencia de China y la inflación

China se ha convertido en un competidor formidable para Alemania, especialmente en la industria automotriz, la más importante del país.

Al igual que Estados Unidos, Europa sufrió un fuerte brote inflacionario durante la pandemia de Covid, con precios que alcanzaron un máximo en 39 años del 8,5% en 2022. Eso llevó al BCE a subir las tasas en 2022-23, elevando la tasa clave de facilidad de depósito al 4%.

Sin embargo, la inflación ha disminuido, cayendo al 2,4% el mes pasado, acercándose al objetivo del 2% del banco central. La reducción sostenida durante dos años llevó al BCE a iniciar recortes de tasas en junio pasado, tres meses antes de que la Fed comenzara su ciclo de flexibilización.

¿Qué sigue para el BCE?

Actualmente, la tasa de facilidad de depósito del BCE se sitúa en el 2,75%, y los inversores anticipan un recorte de 25 puntos básicos el jueves. Las perspectivas a partir de ahí son inciertas. Muchos expertos prevén al menos otros dos recortes antes de una pausa, pero algunos funcionarios del banco central se muestran reticentes, ya que la inflación sigue por encima del objetivo del BCE.

El gran factor impredecible son los aranceles estadounidenses. Donald Trump ha amenazado con aplicar aranceles del 25% a los productos de la Unión Europea, incluido el crucial sector automotriz. Por definición, los aranceles son inflacionarios, y si Trump cumple todas sus amenazas de aumentos, los europeos (y la mayoría del mundo) pagarían precios más altos por una amplia gama de bienes y servicios.

Si la inflación vuelve a subir, eso dificultaría que el BCE siga recortando tasas. Pero, al mismo tiempo, los aranceles también podrían frenar el crecimiento económico en Europa e incluso provocar una recesión, lo que justificaría una política monetaria más flexible.

En consecuencia, el BCE podría quedar atrapado entre la espada y la pared, viéndose obligado a dejar las tasas sin cambios.