Elon se cuela en la fiesta de Jeff

Espero que sea Musk.

Eso fue lo primero que pensé cuando me enteré de que el postor ganador para ser el cuarto viajero (no los estamos llamando astronautas, ¿verdad?) en el viaje del jefe de Amazon (NASDAQ: AMZN) al espacio el próximo mes, pagó 28 millones de dólares por el honor.

Has leído bien esa cifra. Es decir, 28 millones de dólares por un viaje en avión a ninguna parte. En realidad, como el comprador tiene que pagar también una comisión de compra además de los 28 millones de dólares, el precio total va a salir alrededor de los 30 millones de dólares.

Por cierto, el viaje durará 11 minutos. Es decir, 2.727.272,72 dólares por minuto. No es de extrañar que la gente piense que los multimillonarios tienen dinero de sobra.

En cualquier caso, lo primero que pensé fue que esperaba que el adjudicatario fuera Elon Musk, de Telsa (NASDAQ: TSLA). Por los Ja, ja, ja, sobre todo.

A primera vista, se podría pensar que no tiene sentido que Musk sea el que se gaste el dinero. Después de todo, Bezos es un competidor en la batalla de los ricos que van al espacio. ¿Por qué querría ayudar a su competencia?

Bueno, en primer lugar, 30 millones de dólares para estos tipos es como 30 dólares para ti y para mí. No es nada, pero tampoco va a ser una cifra que notes que ha desaparecido después de gastarla. Yo gastaré 30 dólares en algo que me divierta. Es probable que Musk haga lo mismo.

Y, por supuesto que le divertiría. Este es un tipo que claramente busca atención. Va a programas de televisión de variedades. Él twittea sobre criptomonedas basadas en memes. Se casó con Grimes y llamó a su hijo con un símbolo.

Es un buscador de atención. Claramente.

Y podrías imaginar la reacción cuando saliera a revelar que él es el ganador. Nadie hablaría de Bezos y de su conmovedora historia de cumplir su sueño de toda la vida y el de su hermano de ir al espacio. Bueno, casi al espacio, al menos.

No, todo el mundo hablaría de cómo el chiflado de Elon robó el espectáculo. Eso le encantaría.

También le encantaría que Bezos no pudiera decir que ha ganado la carrera. No, sería un empate.

Y, si alguien cuestionara sus motivaciones, Musk podría simplemente alegar que estaba siendo caritativo. Los 28 millones de dólares irán íntegramente a la rama benéfica de «Blue Origin, A Club for the Future». Esa organización benéfica financiará programas de ciencia y educación que tienen como objetivo «inspirar a las futuras generaciones a seguir carreras» en ciencia, tecnología y matemáticas, así como crear un interés en la exploración espacial entre la próxima generación.

Así que está siendo generoso. ¿Cómo se puede discutir eso?

El hecho de que también pueda aumentar el coste de sus propios vuelos comerciales al espacio es solo una feliz coincidencia.

En realidad, cuanto más pienso en esto, más sentido tiene.

Tiene que ser Musk.