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Micro y macro

por
Henry Zheng
Equipo de Comunicación de Producto de Quantfury
Access to space.

Parece que en los últimos tiempos el mundo ha dedicado gran parte de su atención y esfuerzos a mirar a través de un microscopio. Demos un paso atrás para examinar lo contrario y ver las cosas a través de un telescopio, literalmente. Dentro de exactamente un mes se espera que el telescopio espacial James Webb, sucesor del telescopio Hubble, sea lanzado al espacio desde su emplazamiento en la Guayana Francesa.

¿Por qué es tan importante? Con un coste de desarrollo de aproximadamente diez mil millones de dólares que se prolongará durante muchos años, este Telescopio Webb tiene expectativas de convertirse en la maravilla científica de esta década, o incluso, siendo más optimistas, del siglo.

En la eterna trayectoria de avances del hombre, el tema del espacio ha sido sin duda un tema candente a lo largo del siglo XXI. Hace más de tres décadas que el Hubble fue lanzado a la órbita baja de la Tierra, actuando como herramienta de investigación y haciendo avanzar el campo de la astronomía. Más recientemente, los titulares muestran la ostentación y el glamour de Branson al montar su cohete Virgin Galactic (NYSE: SPCE) contra otros multimillonarios competidores en el espacio.

Ahora se está acercando a las etapas finales del lanzamiento de un esfuerzo colectivo, como nunca antes ha hecho la humanidad, hacia el gran desconocido del espacio. ¿La misión? Observar todas las fases de la historia cósmica, arrojando luz sobre lo que aún no se conoce de nuestro propio sistema solar y del universo.

El lanzamiento será un reto, ya que todo debe ser perfecto según lo previsto. Por su diseño, no puede caber en un cohete y, por tanto, está diseñado para plegar meticulosamente las piezas móviles durante su lanzamiento. Tras el lanzamiento, habrá que ensamblar miles de piezas durante un mes en el espacio, y luego 6 meses de puesta en marcha.

En teoría, si se mira a través del telescopio a decenas de miles de años luz, lo que se observa es cómo era el objeto desde hace tanto tiempo, en lugar de ahora mismo en tiempo real. Este concepto en sí mismo parece torcer la materia y el flujo del tiempo en comparación con nuestra comprensión cotidiana.

Con una inversión y unos recursos tan importantes, gran parte del mundo espera algo grandioso a cambio, ya sean descubrimientos científicos o avances tecnológicos. Se espera que las primeras imágenes se recojan en 2022. Es un momento emocionante para ser testigos de lo que este telescopio traerá y de los conocimientos que creará para nosotros sobre el gran espacio desconocido.

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