¿Intel de nuevo al juego?

Todos conocemos a los más grandes fabricantes de procesadores para computadoras, Intel (NASDAQ: INTC) y AMD (NASDAQ: AMD) aunque recientemente se sumó a estas dos grandes compañías, Apple (NASDAQ: AAPL) con la creación de su chip M1.

Hace unos años AMD decidió lanzar una nueva gama de productos orientada al gaming, la serie Ryzen. Esta nueva generación de procesadores eran mucho más eficientes que los de Intel en su momento, por lo que su aceptación en el mercado fue inmediata, mejores rendimientos y menores consumos. AMD fue renovando su serie Ryzen hasta llegar a la más actual, presentada en julio de 2021, así llega la tecnología Zen 3, junto con su procesador tope de línea, el Ryzen 9 5950X.

Por su parte Intel en el año 2020 lanzaba su decimoprimera generación de procesadores los cuales no tenían un gran cambio respecto de la anterior. Esto fue una gran decepción para los seguidores de la marca.

Cada vez más y más gente se veía atraída por las tecnologías y rendimientos de AMD.

Hasta que Intel decidió volver al juego con su nueva generación de procesadores, los Alder Lake, haciendo un trabajo conjunto con Microsoft (NASDAQ: MSFT) para optimizar su decimosegunda generación de procesadores al nuevo sistema operativo, Windows 11.

Pero este trabajo conjunto no queda ahí. Intel se juntó con otras compañías, las cuales brindaron apoyo para la optimización de los nuevos procesadores y están ligadas a la creación de contenido.

Vivimos en un mundo donde la creación de contenido es central. Las redes sociales son un claro ejemplo, como Instagram y/o Facebook (NASDAQ: FB) ambas propiedad de Mark Zuckerberg, las cuales son muy utilizadas por los influencers. Sin embargo no debemos olvidar plataformas como YouTube o Twitch, esta última propiedad de Amazon (NASDAQ: AMZN) en las que la creación de contenido en vivo o la necesidad de correr gran cantidad de programas simultáneamente, hacen necesario contar con grandes procesadores. El gaming también toma una gran relevancia. No obstante esto no queda solo ahí, para la creación de contenido también se necesita edición.

En este caso nos apoyamos de aplicaciones como VEGAS PRO, Adobe After Effects, Adobe Premiere (NASDAQ: ADBE) las cuales demandan muchos recursos de hardware.

Mucho de este contenido está en juegos, renders, diseño gráfico, pero ¿qué sucede si todo este potencial es empleado para la creación de contenido 3D, el cual puede estar orientado a un mundo de realidad virtual?

Ya hemos visto como algunas placas de video están optimizadas para la realidad virtual, las cuales cuentan con chips más potentes.

Es cierto que cada vez los programas demandan más recursos, sin embargo estos son cada vez más avanzados en funcionalidades y para poder ejecutar mundos virtuales se necesitarán procesadores cada vez más potentes.

Intel decidió escuchar al mercado al observar qué es lo que querían y decidió actuar en consecuencia. Utilizando técnicas que desarrollaron compañías como Qualcomm (NASDAQ: QCOM) y luego Apple donde crearon chips de alto rendimiento junto con chips de bajo rendimiento para mejorar su eficiencia.

Estos procesadores de alto rendimiento, están pensados para juegos y edición de contenido.

¿Serán suficientes estas reflexiones y mejoras implementadas para poner de nuevo a Intel como líder en el mercado de procesadores? Para averiguarlo deberemos esperar la respuesta del mercado.