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Los GOAT del deporte, añejan como el vino

por
Kevin Ford
Equipo de Marketing de Quantfury

Recuerdo haber visto a Sampras jugar contra Agassi en la final del US Open en 2002. Clasificado en el puesto 17 y jugando relativamente mal previo al torneo, Sampras entró en el torneo como no favorito. Sin embargo, acabó venciendo a Agassi en la final y consiguió su 14º título de Grand Slam. A pesar de su victoria, Sampras no volvió a pisar una pista, y se retiró a los 32 años. En aquella época, retirarse a los 30 años era la norma.

El pasado fin de semana Rafa Nadal ganó su 21º Grand Slam a los 35 años, Rafa sigue siendo el 5º del mundo y, a pesar de las lesiones y de su estilo de tenis agotador, aún tiene gas en el tanque. Al igual que Sampras, no era favorito al entrar en el torneo y ganó. 

Algunos dirán que Rafa es un fenómeno de la naturaleza. Pero la verdad es que, en los últimos 15 años, hemos visto a más atletas extender su retiro, y muchos siguen rindiendo a su máximo nivel bien entrado en sus 30 s. Entonces, ¿qué está haciendo posible que deportistas de alto rendimiento alarguen sus carreras y redefinan lo que significa la «edad pico» en el deporte? 

Novak Djokovic es el número 1 del ranking de la ATP. Tiene casi 35 años y está jugando su mejor tenis. El serbio te dirá que su secreto para el éxito es una mezcla de ingredientes, siendo la nutrición basada en plantas un elemento clave para la recuperación, el estar alerta en la cancha y el alto rendimiento. Lo dejó claro después de que se le pidiera que fuera productor ejecutivo junto a gente como Lewis Hamilton en el documental de Netflix (NASDAQ: NFLX) «The Game Changers». Hamilton, considerado uno de los mejores pilotos de la historia de la F1, acaba de cumplir 37 años y el año pasado fue probablemente el mejor de su carrera.

La nutrición basada en plantas puede no ser el secreto para todos. En otros deportes físicamente exigentes como el baloncesto, el fútbol americano o el fútbol, las cámaras hiperbáricas y de crioterapia se han incorporado a la rutina del atleta para mantenerse en plena forma. Que se lo pregunten a Lebron James, que a sus 37 años está haciendo otra temporada increíble en la NBA, o a Cristiano Ronaldo, que a sus 36 años parece a veces más un modelo que un futbolista. Es un conocido siestero, y la última Eurocopa dejó claro que el agua, y no la Coca-Cola (NYSE: KO), es su bebida preferida.

Tom Brady, que a sus 44 años anunció su retiro, siguió dando estadísticas increíbles en su última temporada de la NFL. Brady ha hablado abiertamente sobre el uso de «flotadores» para la recuperación muscular, la salud mental y el estado de alerta durante el juego. Al igual que Tom Brady, otros atletas de élite también destacan que el buen sueño y el descanso son esenciales para el alto rendimiento. Un estudio de Stanford descubrió que el sueño y el descanso separan a los grandes de los buenos.

Sin embargo, otros piensan que comer mejor, descansar mejor y entrenar de forma más inteligente podría no tener nada que ver con que los jugadores de la NBA Tim Duncan y Vince Carter se retiraron a los 40 años. Para otros, podrían ser simplemente algo genético. El Dr. Stuart Kim, de la Universidad de Stanford, ha tratado de encontrar vínculos entre marcadores de ADN y la propensión de los atletas a sufrir lesiones y su capacidad de recuperación. Sin embargo, los resultados aún no son concluyentes. 

Por otro lado, sabemos que hay relación entre el deporte y la psicología. Se está tratando de desarrollar neuro-tecnología para mejorar el entrenamiento y el rendimiento de los atletas. Han surgido nuevas empresas que invierten en herramientas para el entrenamiento cognitivo y la lucidez en cancha. Empresas como Halo Sport han creado un dispositivo de neuroestimulación que ayuda a desarrollar la «memoria muscular» más rápidamente. Sports Academy también está irrumpiendo en este campo. En un futuro no muy lejano, podríamos ver a los atletas incorporando interfaces cerebro-ordenador, o BCI, para mejorar el sueño, la salud mental y el rendimiento. Biogen Inc (NASDAQ: BIIB), está explorando el campo de la neurociencia y la tecnología no solo para prevenir enfermedades, sino para mejorar la salud de las personas.

Los avances en la tecnología, la nutrición deportiva, una mejor comprensión del sueño y el descanso y la intersección entre el deporte y la psicología han contribuido a que los atletas permanezcan más tiempo en sus campos y, con ello, dejen marcas legendarias, casi inalcanzables. Los que apenas están empezando se encuentran con un muro al enfrentarse a los veteranos del deporte en sus intentos de hacerse un nombre propio. Tal vez tengan que aprender un par de cosas, no solo sobre los hábitos de entrenamiento y longevidad de alto nivel, sino sobre el impulso interior que se necesita para convertirse en uno de los más grandes.

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