Una guerra dinámica; ¿quién ganará el acero?

por
Enmanuel Cardozo
Equipo de Comunicación de Producto de Quantfury
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Steel Dynamics (NASDAQ: STLD), uno de los mayores productores y recicladores de acero de Estados Unidos, está en el centro de una descarnada guerra contra la industria siderúrgica china. China se encuentra en la irónica dualidad de ser a la vez el mayor exportador mundial y uno de los principales consumidores de acero, que está a punto de implosionar. ¿Podría este acuerdo suponer un duro golpe para la economía china y, de ser así, quién se beneficiará de él?… Mientras las acerías chinas sangran sus beneficios, Steel Dynamics se ha posicionado como un oponente estratégico en medio de las disputas comerciales internacionales del acero.  

Ahora, considere por un momento… el enfrentamiento global por el dominio del acero. 

La industria siderúrgica se encuentra en medio de una guerra a gran escala entre Estados Unidos y China, alimentada por las sanciones impuestas por EE.UU. y la UE, los aranceles comerciales y un poco de diplomacia de la vieja escuela. Durante décadas, China ha sido el mayor productor de acero del mundo, dominando la industria siderúrgica mundial y representando más de la mitad de su producción. Sin embargo, su coraza ha empezado a resquebrajarse. Este dominio parece estar implosionando sobre sus propios cimientos: como consecuencia de una crisis inmobiliaria que avanza lentamente, el bloqueo económico con restricciones COVID-19 hasta finales de 2022 y, no lo olvidemos, los aranceles a la importación de acero impuestos por EE.UU. y la UE que han ido minando poco a poco la coraza industrial de este coloso del acero. 

Lo cierto es que este choque geopolítico está sacudiendo el mercado mundial del acero, provocando importantes fluctuaciones en sus precios. ¿Y adivina qué? El sector siderúrgico chino se está resintiendo. De hecho, los decepcionantes resultados del segundo trimestre así lo demuestran, ya que la industria se ve sometida a una demanda insuficiente. Y lo que en un principio prometía ser una oferta incesante de acero, ahora se balancea al borde de una producción insostenible. 

A pesar de los retos macroeconómicos, con la reducción de los volúmenes de envío y la caída de los precios del acero, Steel Dynamics (NASDAQ: STLD), al igual que su nombre, ha demostrado su fortaleza en este turbulento panorama. En realidad, estos contratiempos no parecen más que baches en el camino para la potencia siderúrgica, especialmente si se comparan con sus beneficios récord en el primer semestre de 2022. Sí, el mercado del acero ha sufrido una recesión, y sí, incluso Steel Dynamics se ha resentido, pero estas turbulencias podrían ser una bendición disfrazada para EE. UU. y sus empresas siderúrgicas locales.

Por otro lado, no podemos ignorar el elefante en la habitación: la crisis inmobiliaria de China. 

De hecho, el modelo de crecimiento chino impulsado por la construcción, que en su día fue la columna vertebral de su enorme producción de acero, se ha convertido ahora en su talón de Aquiles debido a la menguante demanda de acero. La escalada de la crisis inmobiliaria sigue royendo la demanda de acero, amenazando con romper el equilibrio mismo de este sector. ¿De qué magnitud es el trozo? Pues bien, la construcción representa el 55% de la demanda de acero en China, lo que indica un posible desplome de la industria siderúrgica china. 

A pesar de la fuerte caída de los precios del acero y la reducción de los beneficios, las acerías chinas se obstinan en seguir adelante. Pero hay una razón para que sigan produciendo. Sencillamente, el cierre de estas plantas siderúrgicas no es una opción, ya que presenta su propio conjunto de desafíos. Una vez fuera de servicio, necesitan hasta seis meses para volver a funcionar a pleno rendimiento si la tendencia se invierte. Esto deja a las acerías a la deriva, haciéndolas vulnerables a las presiones económicas y operando con pérdidas durante meses. No es de extrañar que un asombroso 30% de las empresas siderúrgicas chinas estén al borde de la quiebra. Las acerías, otrora engranaje fundamental de la expansión económica china, empiezan a hacer sonar las alarmas sobre la salud de los dos sectores clave de China: la industria manufacturera y la construcción inmobiliaria. 

Y ahora, señoras y señores, ¡el juego se prepara para un giro interesante! 

La debilidad de China señala una clara oportunidad para que EE.UU., y las empresas siderúrgicas por igual, cojan la oportunidad por los cuernos. Mientras EE.UU. y Europa siguen endureciendo sus límites a la importación de acero, compitiendo por el dominio en el comercio mundial del acero… Y francamente, sin ningún lugar al que huir, el gobierno chino puede verse acorralado a llevar a cabo más recortes de producción en sus acerías para evitar mayores efectos en la economía del país. Todas las miradas están puestas ahora en Pekín, y la pregunta es: ¿cuál es el próximo movimiento de China? Tal vez, esta sea exactamente la posición en la que Estados Unidos quiere estar para ganar terreno en el campo de batalla sobre el comercio del acero.  

Cabe preguntarse si Steel Dynamics (NASDAQ: STLD) puede convertirse en una pieza importante del arsenal siderúrgico estadounidense en esta dinámica lucha de poder entre naciones. Con las piezas en movimiento, todos los jugadores están en vilo, a la espera de ver cómo se desarrollan las crecientes presiones económicas y las políticas comerciales en los próximos años. Una cosa es segura: la guerra por el acero no ha terminado.